Martes

Martes…
Brillantes, de dolores cerebrales
suena una vieja canción
revolviendo recuerdos anteriores
¿Por que los que vivimos sujetos
en nuestro propio estomago
nos cuesta tanto trabajo
sonreír despacio y duradero?
Hoy, me hubiera conformado
con terminar bailando
sobre la misma camisa
que me abroché esta mañana
surcar las mismas ilusiones
abrazar a las mismas hermanas
que se escandalizan…
Cuando estoy totalmente alegre
y de vuelta al pesebre
allí donde falacia y fapencia
se anidan, se cobijan y mueren
rezarle al Dios misericordioso
que ahuyenta la vida y distrae la suerte…

Ahora, tengo un fuerte dolor
en el costado, creo que es pago
o penitencia, que cumplo
por soñar despierto…
¿Por qué el mundo se empeña
en dibujarnos con aroma nauseabundo?
No busco triunfo, sí la victoria
en esta guerra que somos nosotros
pieles deshechas y huesos roídos
una mueca siniestra de espíritu bandido…
Me carcomes, Esperanza, me carcomes
y eyaculas tus fantasías
a un millón de direcciones
lejanas de mi propia casa…
Pero se me pasa, con una sonrisa tuya
o con unas alas azules de estela dorada…
Que en un sin decir, nada; observa….
Y caigo, y suelo…
Sucumbir al placer de entender
los sueños que me brinda cerebro
y ceder, a la fuerza subyacente
del mejor amante, del mejor pretendiente
que albergo…

La eterna sinrazón de mi amo

Es la enésima vez que vengo, con un mandamiento
un trozo de papel silbado al viento
lleno de deseos, ilusiones y lamentos
otra noche más que lo arrugo
otra mañana más que lo estiro
Tú, podrías vencer todos mis miedos…

Estoy ofreciéndote toda mi furiosa ira
mis niveles básicos de sátira
mis ansias, alegrías, mi mentira
cada vez más dichoso
cada mirada más deseoso
Tú podrías vestirme en la mañana….

Tú, Tú, Tú, déspota….
Yo, solamente regencia..
De amor…
De ternuras…
De cuidados…
Para cuando Tú crezcas…

Pero admitámoslo, no hay ropa
que nos junte las bocas
que con pocas nociones básicas
de pasión y acertadas melodías
nos arraigue al pecho alegría
y vibración continua del alma…

Y aquí te espero sentado
en un trono de óxido acolchado
con ribetes de cuernos expuestos
con diretes de cabreos punzados
me pagas con tus defectos
y Yo perdono, la eterna sinrazón de mi amo…

Flores de Magnesio

Bergamota...
Belladona...
la sota de bastos comenta
el enano toca el acordeón
luces de Nerón y menta
condenan la tormenta de mis cielos
y en todos ellos, flores de magnesio...


me silban los oídos
acabo de salir de la cueva
se entremezclan los aromas
de la canela, el veneno y el pastel de crema
nena, agarrame la mandolina
puedes hacerme llorar, si quieres...


si paces, mátame
aqui al lado, embrutecido
tu perfume de suelos enrarecidos
me carcome un tríptico...
no puedo llorar si grito
no puedo gritar lleno de vómitos...


vuelvo, a la pared rasgada
donde no tengo nada, estoy
oxidado, quien se avendrá
en este lugar apartado...
el polvo te cierra los ojos...
el animal no es tan fiero...
ya se escapan, flores de magnesio...

MI hermano

Mi hermano dice que sólo escribo versos cuando estoy enamorado
Y es probable…
Que únicamente publique si hay algo desdeñable
Pero no es el caso…
Hoy me hallo vacío de cualquier sentido especializado
Salvo sabor genérico…
Que proceso de los recuerdos a sentimientos encontrados
Estoy cansado…
Pero esta noche de seguro que aguanto entre las sábanas
Es más…
Voy a encerrar la cabeza debajo de la almohada
Sin pensar…
Ni soñar ninguna de esas ilusiones que son mis falacias
Imaginando…
Un aprobado correcto, un curro generoso, una causalidad que te traiga
A esta alcoba…
Infestada de humo y letras que no valen para nada

Tú, no puedes amar a un chico que no tiene futuro
Que no lucha…
Todos y cada unos de los días contra sí mismo
Por venganza…
De la dureza extraña de haberte dejado escapar
No puedes…
O si que puedes y lo haces, tan secretamente y alejada
Como yo lo hago…
Tal vez las noches cagalderas no aproximen el destino
Tal vez…
Si fuera más valiente no escaparías de mí, tal vez
Todo lo que escribo…
No sea más que un reflejo de cómo me veo en el mundo
Ignorando…
Si son reales las niñas por las que vivo entre los folios
Manchando…
De odio, de todo el odio con el que me puedo mirar a la cara

Te aseguro que estaba proponiéndomelo, lo de las mañanas
Pero…
La suerte en la noche me es esquiva y se transforma en madrugadas
Vaya…
La barba, los labios, la dentadura y mis medias ojeras diurnas
Te hablan…
Y destierran cualquier argumento sin base sólida
No quiero soñar…
Me lo he dejado, después de mucho dudarlo
Pues…
Este mundo de mierda que tengo me incita a cuidarlo
Al hogar…
A la dulce sensación de bienestar, económico, lúdico, extraescolar
Me arrastro…
Por cada uno de los lugares donde mi ánimo esta relajado
Vuelve el arisco…
Aquel que crece conmigo y de cuando en cuando, me pinta las manos